Por defecto cuando instalamos un TrueNAS la configuración de la interfaz lo hace a través de DHCP. Sin embargo, para aplicaciones de intercambio de archivos a través de NFS (Network File System) o SMB (Server Message Block), depender de una dirección IP dinámica asignada por DHCP puede presentar inconvenientes significativos.

La variabilidad de la IP puede complicar el acceso consistente a los recursos compartidos, ya que los clientes que acceden a estos servicios necesitan una dirección IP fija para referenciar el servidor de manera confiable.

Una alternativa más robusta para entornos que requieren estabilidad en la conectividad y el acceso es configurar una dirección IP estática para el servidor TrueNAS. Esto se puede lograr de manera efectiva asignando una IP fija directamente en la configuración de TrueNAS.